viernes, 23 de noviembre de 2012

¿qué miras en ese espejo salvador?
¿una familia, una creación, un desamparo?
¿todas esas cosas juntas?
Esa brújula que te guía para trazar tu camino, debe primero obligarte a abandonar los apegos, tus propias conservaciones, tus prejuicios, tus miedos. Si no el viaje que emprendas será de una ajenidad tal, que hasta los adoquines estarán violentados por las mismas ideas y conceptos que te detienen, que te alejan. 
Ya no creo en el futuro, está enlazado al control, a la manipulación
todos aquellos anhelos son utópicos, planificados...
El hoy, el ayer y el ahora se regodean y entremezclan para abatir lo instituido, lo conformado herméticamente durante años. Una moral dura, añeja fue cristalizada , embrollada. Nunca discutida.
¿Cómo un pez puede nadar tan desprejuiciadamente por las distintas mareas y ríos que se le presentan?
¿Cómo un pájaro vuela y se erige por países tan disimiles?
La adaptación tan negativamente escuchada y llevada, no habla sólo de sumisión, en tantos casos comunes. También habla de apertura y flexibilidad

Dejarse llevar. Fluir. Ser. Vivir

Responder a los múltiples atravesamientos que se dan en el día a día...
La bisagra de la puerta, permite la conexión entre la pared y lo que abre y cierra a ella, si ésta se encuentra muy dura, la apertura será forzada. En cambio, si sus clavos no se encuentran lo suficientemente apretados, el deslizamiento de la puerta se dará de una manera más natural, más fluida.